La primera lesión de la pretemporada le tocó a Chevantón, lesión que pudo ser muy grave pero que afortunadamente parece que no ha llegado a tanto. Pero de todas formas le impedirá iniciar la pretemporada con el resto de sus compañeros, y seguro que se perderá los primeros partidos.
Y ahora le ha tocado a Jesús Navas. El palaciego ha sufrido una recaída en su antigua lesión, y al igual que Cheva tampoco participará en el torneo de Chicago.
La diferencia entre Cheva y Navas es que la lesión de Jesús no es muscular, ni ósea, ni siquiera un problema circulatorio, sino que se trata de una lesión psíquica. Pero creo que aún así debe tratarse como lo que es, como una lesión, independientemente del origen de la misma. En España somos muy nuestros para algunos temas, por ejemplo con la consideración social de las enfermedades psíquicas o mentales. Aunque un elevado porcentaje de la población haya sufrido de depresión, seguimos pensando que el que tiene una enfermedad mental, o está loco o tiene "mucha cara".
Y en el caso del magnífico jugador sevillista se dice que ni al entrenador ni a algunos de sus compañeros les hace ni pizca de gracia que Navas se "salte" las giras y las concentraciones. Pienso que están en un error si no entienden que el chaval está tan lesionado como lo pueda estar Chevantón, que si según sus médicos no puede viajar, es que no puede y punto.
Y además el rendimiento de Navas suele ser tan bueno como si acudiera a todos los viajes. Aunque en la última temporada se ha comentado que no ha estado a buen nivel, en mi opinión ha sido pieza fundamental del equipo, y se olvida que Alves con Navas delante es mucho más Alves. También se olvida que muchos goles del gran Kanouté vienen de pases del extremo canterano, como por ejemplo el de la final de la copa Uefa, o el de la Supercopa de Europa frente al Barcelona. Ahora Jesús está lesionado, y en lugar de criticarle habría que animarle y tener paciencia, como se hace con cualquier otro lesionado.
Y ahora le ha tocado a Jesús Navas. El palaciego ha sufrido una recaída en su antigua lesión, y al igual que Cheva tampoco participará en el torneo de Chicago.
La diferencia entre Cheva y Navas es que la lesión de Jesús no es muscular, ni ósea, ni siquiera un problema circulatorio, sino que se trata de una lesión psíquica. Pero creo que aún así debe tratarse como lo que es, como una lesión, independientemente del origen de la misma. En España somos muy nuestros para algunos temas, por ejemplo con la consideración social de las enfermedades psíquicas o mentales. Aunque un elevado porcentaje de la población haya sufrido de depresión, seguimos pensando que el que tiene una enfermedad mental, o está loco o tiene "mucha cara".
Y en el caso del magnífico jugador sevillista se dice que ni al entrenador ni a algunos de sus compañeros les hace ni pizca de gracia que Navas se "salte" las giras y las concentraciones. Pienso que están en un error si no entienden que el chaval está tan lesionado como lo pueda estar Chevantón, que si según sus médicos no puede viajar, es que no puede y punto.
Y además el rendimiento de Navas suele ser tan bueno como si acudiera a todos los viajes. Aunque en la última temporada se ha comentado que no ha estado a buen nivel, en mi opinión ha sido pieza fundamental del equipo, y se olvida que Alves con Navas delante es mucho más Alves. También se olvida que muchos goles del gran Kanouté vienen de pases del extremo canterano, como por ejemplo el de la final de la copa Uefa, o el de la Supercopa de Europa frente al Barcelona. Ahora Jesús está lesionado, y en lugar de criticarle habría que animarle y tener paciencia, como se hace con cualquier otro lesionado.
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