¿Y el fútbol?

Mañana miércoles, día de Andalucía, es la fecha en que conoceremos si Del Nido va al palco del estadio del Betis, y sabremos también si le dejan entrar o no. Pero algo más va a suceder mañana: se va a jugar un partido de fútbol.

Esto parece que últimamente está siendo eclipsado por el veto bético a la directiva sevillista, pero es el hecho más importante. Los dos clubs sevillanos se juegan pasar a semifinales de la Copa del Rey, y por ello es uno de los partidos más importantes de la temporada, además de otros condicionantes que lo hacen uno de los derbis más interesantes de los últimos tiempos, como bien señala en su blog Paco Galadi.

Desde el punto de vista puramente deportivo, creo que el Sevilla es favorito. El resultado de la ida dejó todo pendiente para mañana, pero la diferencia de calidad entre las dos plantillas es enorme, y el estado de forma también. Es cierto que el Betis ha ganado en seguridad defensiva con la llegada de Luis Fernández, pero no es menos cierto que muestra una incapacidad importante cara al gol. En liga consigue muchos empates a cero, lo cual es mejor que perder, pero sigue estando a dos puntos del descenso.

El Sevilla ha vuelto a mostrar su nivel de juego de antes de la "crisis", sobre todo en los partidos más importantes que ha disputado recientemente (la ida ante Steaua, y en casa frente al At. de Madrid). Esto hace pensar que el cansancio psicológico puede haber sido mayor que el físico, y que cuando el equipo está mentalizado al cien por cien, sigue siendo el equipo arrollador que fue en 2006.


En mi opinión, si el Sevilla marca antes la eliminatoria estará decidida. Veo difícil que el Betis, en circunstancias normales (sobre todo arbitrales) le marque dos goles seguidos al Sevilla. Si el Betis marca antes, el Sevilla sí tiene capacidad para al menos empatar (lo que le clasificaría), aunque es cierto que la defensa del Betis está siendo bastante rocosa ultimamente. Una pena que no esté Adriano, y que Puerta no esté a tope físicamente, porque la banda derecha de Illic es la zona más vulnerable de los verdiblancos.

Se espera un partido tenso, en el que el más interesado en que no haya verdadero fútbol será el Betis, por lo que corresponderá al Sevilla no caer en provocaciones, interrupciones, y demás armas de ese "otro fútbol" que empleará el equipo rival. Debemos mantener la concentración e intentar que el ritmo de juego sea lo más alto posible.

Como el tarifeño Fernández ordenará estrechar el campo lo más posible, el Sevilla tendrá también que buscar huecos con buenos movimientos por el centro, para lo cual nos faltará Maresca, pero esperemos que Renato, Kanouté y Luis Fabiano sepan romper la defensa con paredes y acciones individuales. Y las jugadas a balón parado pueden ser decisivas, algo en lo que el Sevilla no acaba de ser lo suficientemente peligroso.

En fin, alta tensión en el terreno de juego, con un equipo que buscará los penaltis, y otro que deberá arriesgar un poco, y tener acierto cara al gol, para que su superioridad teórica se vea reflejada en el resultado final. La clasificación para la semifinal copera y la eliminación del eterno rival merecen dar todo lo posible por lograrlo.