jueves, 2 de noviembre de 2006

Van ganando ellos

Me gusta hablar de mi equipo, y también escuchar lo que dicen otros sevillistas, y por ello sigo con interés los medios oficiales del club, y también los blogs en los que los aficionados publican sus opiniones. Y desde hace tiempo vengo observando cómo esas opiniones de los sevillistas tienen en muchas ocasiones relación con los medios de comunicación.

Me gusta hablar de mi equipo, y también escuchar lo que dicen otros sevillistas, y por ello sigo con interés los medios oficiales del club, y también los blogs en los que los aficionados publican sus opiniones. Y desde hace tiempo vengo observando cómo esas opiniones de los sevillistas tienen en muchas ocasiones relación con los medios de comunicación. Dejando aparte el tema fundamental del problema televisivo, se comenta a menudo que si esta radio ha dicho esto, que si en esta televisión han dicho lo otro, que si aquella web ha publicado lo de más allá...

Todo lo que trata sobre el Sevilla es interesante, y además es necesario aclarar confusiones o mentiras que puedan publicarse. Pero debe ser siempre algo secundario, algo a lo que se le presta la atención justa, y se pasa rápidamente a lo que de verdad nos debe importar: nuestro Sevilla F.C., y no lo que digan de él otros.

Vivimos momentos gloriosos, que quedarán para la historia del sevillismo. Dentro de veinte años se hablará de los goles de Maresca en Eindhoven, del descosido que le hicimos al Barça en Mónaco, de las carreras de Jesús Navas, de la clase de Kanoute, de la seguridad de Javi Navarro, de la inteligencia táctica de Juande... Pero dentro de veinte años nadie hablará de la radio tal, del periódico cual, o de no sé qué web. Porque entonces se recordará sólo lo importante, y no lo secundario.

Ahora también sería bueno que los sevillistas distinguiéramos lo que es importante, y centrarnos en ello. Porque si nos pasamos el día indignados por lo que dicen por ahí, entonces no estaremos disfrutando de los mejores momentos de nuestro club en muchos, muchos años. Si en lugar de ir por la vida con una sonrisa de oreja a oreja gracias a los éxitos del Sevilla F.C., vamos con el ceño fruncido por los comentarios de los que sólo quieren perjudicarnos, entonces esos se habrán salido con la suya, nos habrán amargado los triunfos por los que tanto nos envidian.

Y por ahora, desgraciadamente, parece que lo están consiguiendo. Si nos han declarado la guerra, cuanto más caso les hacemos, cuanto más nos indignamos, más cerca están de ganarla. No les dejemos.




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